La deshumidificación adecuada de su hogar es esencial para evitar la formación de moho. Para ello, no es necesario contar con un deshumidificador, basta con recurrir a algunos remedios naturales, como la sal gruesa y el bicarbonato de sodio. Veamos cómo eliminar la humedad de la casa de forma natural.

El exceso de humedad es un problema que afecta a muchos hogares, especialmente en otoño e invierno, las estaciones más húmedas. ¿Es posible deshumidificar la casa sin recurrir a un costoso deshumidificador? Seguro que sí, existen varios remedios naturales efectivos y a la vez económicos y ecológicos . Por ejemplo, la sal gruesa es excelente para absorber el exceso de humedad, mientras que el bicarbonato de sodio es muy efectivo contra las manchas de moho que se forman en las paredes o muebles de madera.

Evidentemente, también es importante prevenir la humedad y el moho con algunas precauciones, como la sustitución de elementos demasiado aislantes, la intervención de infiltraciones y estancamientos de agua y, a menudo, la ventilación de las habitaciones, especialmente los baños y la cocina.

Veamos en detalle cómo eliminar la humedad en las habitaciones de forma natural.

Cómo deshumidificar la casa y prevenir la humedad

Antes de recurrir a los remedios naturales, es importante poner en práctica algunas reglas sencillas, que ayudan a reducir el exceso de humedad y tener siempre un hogar fresco y seco. Esto es lo que son:

  • a menudo ventilar las habitaciones. Especialmente cuando hace sol, es una buena idea abrir las ventanas durante al menos 10 minutos al día. Cuando no haga mucho frío, mantener las ventanas abiertas mientras se cocina o después de ducharse, ayuda a dispersar la humedad ya secar la condensación que se forma con el vapor;
  • evitar la formación de vapor . Si su baño no tiene ventana, instale un ventilador y manténgalo encendido durante y después de la ducha. Si no puede ventilar la cocina, encienda la campana mientras las ollas están en la estufa;
  • evita que el agua de lluvia se estanque en las paredes exteriores, modificando los canalones si es necesario o conduciéndola a una cisterna;
  • evitar el estancamiento en los platillos de las plantas de interior , otra fuente de humedad;
  • instale un ventilador de techo , que aspire aire seco y disperse la humedad;
  • cambie los accesorios , si son demasiado aislantes.

Remedios caseros para deshumidificar la casa

Pasemos ahora a los remedios más efectivos para eliminar la humedad del hogar de una vez por todas, sin utilizar un deshumidificador eléctrico no ecológico.

Sal gruesa

La sal gruesa es ideal para construir un deshumidificador de bricolaje . Si quieres ponerlo en un cajón o armario, puedes cortar un cuadrado de tela de una camisa vieja o un pantalón de pijama, llenarlo con 100 gramos de sal gruesa y cerrarlo bien con una cinta. Deja reposar la bolsa en la nevera unas diez horas y luego guárdala en cajones, armarios o roperos. La sal, junto con el arroz, tiene una excelente absorbencia. Cuando las bolsas ya estén mojadas, reemplácelas.

Para deshumidificar habitaciones más grandes, puedes poner la sal en una botella de plástico o bandeja  con tapa perforada. Calcula la cantidad de sal a poner teniendo en cuenta que cada 16 metros cuadrados necesitas 100 gramos de sal. También puedes usar un colador : ponlo en un bol, cúbrelo con un paño de algodón y ponle unos 200 gramos de sal. Una vez mojada, la sal se puede secar metiéndola en el horno durante un cuarto de hora a 150 grados. De esa manera, puedes reutilizarlo hasta cinco veces.

Por último, puedes utilizar la lámpara de sal rosa del Himalaya en ambientes especialmente húmedos , que además de absorber la humedad de la habitación y hacer que el aire sea más respirable, ilumina el ambiente con una luz suave y relajante.

Bicarbonato de sodio

El bicarbonato de sodio es perfecto para eliminar las manchas de moho que se forman en las paredes y los muebles. Si las manchas de humedad son muy grandes, verter sobre ellas un puñado generoso de bicarbonato sódico, cepillar con una esponja seca y dejar actuar unas dos horas, para darle oportunidad de que absorba completamente la humedad. Transcurridas dos horas, eliminar los restos de polvo con una esponja ligeramente humedecida y secar bien con un paño de microfibras.

También puede usar bicarbonato de sodio para absorber la humedad en la cocina o el baño colocando unas cuatro o cinco cucharadas en un recipiente y cubriéndolo con un paño de algodón. De igual forma, puedes utilizar gel de sílice o cloruro de calcio, que son más difíciles de encontrar.