La cebolla es uno de los ingredientes imprescindibles en la cocina. Particularmente ricas en antioxidantes y vitamina B6 y C, estas hierbas tienen muchos beneficios para la salud.

Por lo general, estas raíces bulbosas se guardan en un lugar fresco, seco y oscuro como la despensa. Entonces, ¿qué sucede cuando se colocan en el congelador? Descubre rápidamente este truco que resulta muy útil y ventajoso.

Un aliado imprescindible en la cocina, la cebolla es perfecta para condimentar y dar sabor a muchos platos. Siempre es útil tenerlo en tu despensa.

Cuando te quede un poco después del corte, no dudes en guardarlo en el congelador para beneficiarte de sus múltiples beneficios.

¿Por qué se deben colocar las cebollas en el congelador?

Es una buena idea colocar las cebollas en el congelador antes de cocinarlas. La razón puede sorprenderte y hacer tu vida diaria más fácil. Una vez que hayas probado esta técnica, no podrás prescindir de ella.

Es posible cortar cebollas sin derramar una lágrima.

Muy pocas personas saben esto, pero colocar una cebolla en el congelador puede ser particularmente beneficioso. De hecho, esta punta ayuda a reducir los desgarros durante el corte y previene la irritación de los ojos.

Todo lo que tienes que hacer es poner las cebollas crudas en el congelador durante 15 minutos antes de pelarlas. Hay otras formas de hacerlo sumergiéndolos en un recipiente con agua helada, manteniendo una toalla húmeda o un recipiente con agua cerca de la tabla de cortar, o simplemente cortándolos bajo el agua. Esto evita la liberación de un gas volátil que irrita los ojos.

¿Por qué la cebolla causa ojos llorosos?

Al ser una raíz bulbosa, la cebolla es una de las plantas que almacena fácilmente el azufre contenido en el suelo. Estos se acumulan en forma de moléculas en un área llamada vacuola.

También es gracias a estos componentes de azufre que le dan a la cebolla este olor y sabor tan particular. Entonces, cuando cortas una cebolla, estos componentes se mezclan con otra enzima llamada alinasa.

Esto produce una reacción química que libera un gas, en forma de ácido sulfúrico, que irrita los ojos. Para protegerse, los ojos producen un mecanismo de defensa derramando lágrimas reflejas.

– ¿Qué otras razones para congelar cebollas?

Además de prevenir los ojos llorosos, congelar cebollas ha demostrado ser útil en la cocina. Antes de congelarlos, es recomendable blanquearlos sumergiéndolos en agua hirviendo sin sal durante solo dos minutos.

Esto retrasa su degradación y evita que su olor penetre en el congelador. Déjelos enfriar, luego séquelos con un paño de cocina limpio y colóquelos en bolsas para congelar.

– Congelar cebollas ahorra tiempo

Es posible cortar cebollas el día anterior para cocinarlas al día siguiente. Es muy práctico cuando no te gusta pasar horas en la cocina.

Para ello, simplemente pela y corta una cebolla en aros, tiras o cubos según tus preferencias. Luego póngalos en bolsas o cajas para congelar.

También hay cajas de olor de acero que limitan la propagación de olores de cebolla en el congelador. Este truco te ayudará a sacar la cantidad que necesitas para cocinar cada vez.

– Congelar las cebollas las mantiene mejor

Para almacenar las cebollas correctamente, es esencial seguir los pasos anteriores pelando y picando las cebollas de antemano.

Colocar estas hierbas en el congelador evitará que se ablanden o se enmohezcan mientras conservan su sabor.

Como habrá entendido, almacenar las cebollas en el congelador no solo reduce el desgarro, sino que también garantiza un almacenamiento adecuado.

Además, evita colocarlas junto a patatas que también producen un gas que acelera su descomposición.