Sucede que al cabo de unos años los azulejos del suelo o los del baño y la cocina pierden el brillo que los caracteriza, volviéndose opacos y con un aspecto “triste”.

Si está buscando formas de recuperar mosaicos aburridos, está en el lugar correcto. En este artículo te sugerimos 4 trucos de la abuela para conseguir resultados perfectos.

Los azulejos del piso o del baño tienden a perder su brillo original debido a la grasa, los residuos, la humedad y también la piedra caliza presente en el agua.

Por este motivo, la limpieza periódica de nuestros azulejos es fundamental. Sigue los pasos que te sugerimos a continuación para que los azulejos mate brillen.

Azulejos brillantes con vinagre

  1. El vinagre es uno de los mejores productos naturales para la limpieza de muy diversos tipos de superficies, y es especialmente útil contra la cal y la suciedad.
  2. Humedece un algodón con vinagre puro y pásalo por las baldosas. Si eso no es suficiente, haz dos pasadas.

Bicarbonato de sodio y sal para que los azulejos brillen

  1. Otro truco efectivo es mezclar partes iguales de agua, bicarbonato de sodio y sal.
  2. Mezcla bien hasta obtener una mezcla homogénea y pásala sobre los azulejos con la ayuda de una esponja.
  3. Frote bien, luego enjuague con abundante agua.

Pasta de dientes para limpiar azulejos

  1. La pasta de dientes es uno de los productos blanqueadores más efectivos, especialmente los hechos con bicarbonato de sodio.
  2. Aplique un poco de pasta de dientes a una esponja o cepillo de dientes y frote los azulejos.
  3. Finalmente, aclara con abundante agua fría.

Por último, amoníaco y alcohol para pulir los azulejos.

  1. Si los métodos anteriores no son suficientes, el método a base de amoníaco y alcohol resolverá todos sus problemas.
  2. Mezcle partes iguales de agua, amoníaco y alcohol y limpie los azulejos con un paño limpio.
  3. Recuerda llevar guantes y mascarilla para protegerte del vapor y del contacto con estas soluciones.