En invierno, las plantas de interior requieren un cuidado especial. Algunas plantas menos resistentes no toleran bien las heladas y el frío. Entonces pueden verse afectados por la caída de la temperatura. Para permitir que las plantas pasen bien el invierno, es necesario hacer algunos ajustes. Incluso la ingesta de agua debe ser reconsiderada. Descubre cómo regar tus plantas de interior en invierno.

Cuidar las plantas de interior en invierno no es fácil. La calefacción, la falta de sol y las temperaturas más bajas son limitaciones a las que se enfrentan las plantas durante este período frío del año.

plantas verdes de interior

¿Cómo regar las plantas de interior en invierno?

Las necesidades de agua de la mayoría de las plantas de interior disminuyen en invierno y, por una buena razón, su crecimiento se ralentiza. Además,  algunas plantas se vuelven inactivas.  Durante este período de descanso, las plantas inactivas necesitan una pequeña cantidad de agua. De ahí la necesidad de reducir la frecuencia de riego. Requieren riegos cada 15 días, para  evitar la acumulación de agua en el compost  que provoque la pudrición de las raíces. Pero lo mejor es comprobar primero el sustrato. Para hacer esto, empuja tu dedo en el suelo. Si está mojado, no lo riegues.

La frecuencia de riego en invierno  también depende de la variedad de plantas.  Las suculentas solo necesitarán ser regadas cada 2 o 3 semanas. Además, las suculentas, también llamadas suculentas,  tienen tejidos carnosos que les permiten almacenar agua. Luego pueden sobrevivir varias semanas sin riego. Este es particularmente el caso de los cactus. Por otro lado, las plantas  que florecen en invierno, como las flores de Pascua  o los cactus de Navidad, deben regarse cuando  el suelo esté seco.

Tenga en cuenta que no se recomienda regar las plantas con agua fría. Esto puede  crear un choque térmico en la planta  y dañar su sistema radicular. También evita usar agua caliente. Lo mejor es regar tus plantas con agua a temperatura ambiente.  También prefiera el agua de manantial, no calcárea.

agua planta de interior

Además del riego, hay un aspecto importante a tener en cuenta, a saber, la humedad. A las plantas de interior, especialmente   las plantas tropicales como las orquídeas, les gusta la humedad.    Pero con el calentador,  el aire ambiente se seca y, por lo tanto, seca la planta . De hecho, el nivel de humedad de una casa con calefacción puede descender hasta un 10 % o un 20 %. Sin embargo, las plantas de interior agradecen un índice de humedad cercano al 50%. Dicho esto, considera  rociar el follaje de tus plantas  o usar un humidificador en la habitación donde las guardas. También puedes poner tus plantas en la cocina o el baño. Así, no tendrás que preocuparte por regarlas, ya que absorberán la humedad de estas partes.

También puedes llenar vasos grandes con bolas de arcilla que mantendrás húmedas y colocar cuñas encima de estos vasos. Luego instale sus macetas en las cuñas para permitir que las plantas absorban la humedad  sin que sus raíces se empapen en agua.

planta de interior

¿Cómo mantener las plantas de interior en invierno?

– Desempolvar las hojas:  Empapa un paño en agua y pásalo por el follaje de tu planta para quitar el polvo. Este último impide que la planta absorba los nutrientes que necesita para su crecimiento, al igual que  impide su fotosíntesis.

– Evita corrientes de aire y radiadores:  A las plantas de interior no les gustan los cambios de temperatura. Evite mantener su planta en una habitación sobrecalentada y protéjala de las corrientes de aire. Además, elija cortinas gruesas para sus ventanas para proteger sus plantas colocadas cerca de las ventanas del descenso de la temperatura por la noche. No coloque su planta cerca de una fuente de calor como un radiador o una chimenea  para evitar quemar su follaje.

– Atención a los parásitos:  La falta de luz solar, el aire seco provocado por la calefacción o el exceso de humedad favorecen la aparición de parásitos. Su planta  de interior  puede estar infestada de  cochinillas, mosquitos de los hongos, arañas rojas y pulgones. Además, se recomienda monitorear las plantas para tratar su follaje tan pronto como aparezcan estas plagas.

– Asegurar la exposición de la luz a las plantas:  En invierno, los días son más cortos y por lo tanto las plantas no reciben suficiente luz. Mueva sus plantas a un invernadero si tiene uno. De lo contrario, mantenga sus plantas cerca de una ventana, pero no demasiado cerca del vidrio  para no exponerlas a corrientes de aire . Recuerda también limpiar bien las ventanas para permitir que los rayos del sol se infiltren mejor en la habitación.

– Evita los fertilizantes:  Dado que el crecimiento de las plantas se ralentiza en invierno, evita abonarlas para no alterar su ciclo natural. Reanude la aplicación de fertilizantes durante el período de crecimiento vegetativo.

Las plantas de interior son fáciles de cuidar, pero en invierno, algunas necesitan un tratamiento especial para mantenerlas verdes, y permitirles retomar mejor su crecimiento y floración, una vez pasado el frío.